Encontraré un camino
hasta llegar a ti.
Conseguiré
desnudarte.
Te miraré sin
extrañeza,
porque nuestro
destino es compartirnos.
Alma, cuerpo, mente:
son fronteras de
humo.
Solo tú y yo somos
reales.
Aunque no pueda acariciarte
por dentro,
ni palpar el hálito
que te impulsa,
puedo sentirte
rodeándome en todas direcciones.
Sé que caminas
conmigo cuando paseo en solitario
y siento como una
agradable tristeza.
Antes del fin serás
mía,
y yo seré de ti,
Antes de que se encuentren
la vida y la muerte,
tu corazón habrá
latido en mi pecho.
UN poema lleno de promesas. Enhorabuena
ResponderEliminarun abrazo
fus
Las promesas son la antesala de la decepción... y de la felicidad. Solo hay que vivir para descubrirlo.
ResponderEliminar¡Un abrazo, Fus!
El amor ofrece dos alternativas: felicidad o tristeza, y muchas veces van de la mano. Me encantó el poema, muy romántico.
ResponderEliminarLa alegría y la tristeza poseen innumerables formas e infinitas vidas breves. La sonrisa asume una postura distinta cada vez. El sabor de las lágrimas nunca se repite. Ambas emociones son valiosas porque se complementan para componer la vida.
ResponderEliminarEl amor debemos de vivirlo, con su lado bueno y su lado malo, con sus complicaciones y sus alegrías...pero....si no sabemos lo que es amor...¿¿que sería de nosotros??
ResponderEliminarMilll besitos, me encantó
Así es, midala. El amor es un fin en sí mismo, capaz de compensar muchas otras carencias.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
POEMA ROMANTICO Y CON UNA GRAN ESPERANZA
ResponderEliminarME AGRADÓ PASAR POR AQUI